DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2018
365 VIVENCIAS DE JÓVENES COMO TÚ
Lecturas devocionales para Jóvenes 2018
«No me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para que todos los que creen alcancen la salvación, los judíos en primer lugar, pero también los que no lo son». Romanos 1: 16
CURSABA EL SEXTO SEMESTRE de la licenciatura de Biología. El profesor de Evolución nos asignó un trabajo en grupos. La tarea consistía en exponer el origen y destino del ser humano desde la perspectiva del hinduismo, budismo, judaismo, cristianismo y evolucionismo. Desde luego, el profesor era ateo y deseaba escuchar que se exaltase la teoría de Darwin. Hacer lo contrario ponía en peligro la clase y por ende la licenciatura.
De manera intencional, escogí las perspectivas judía y cristiana. Esos días, le pedí a Dios la oportunidad de presentar el evangelio en la clase. Sentí que Dios me decía: «Tu exposición debe ser una predicación» y así me preparé. Cuando llegó mi tumo, dije que trataría el tema de manera objetiva, expondría lo que el judaismo y cristianismo creen sin alterar nada, al fin y al cabo mis compañeros ya habían defendido la tesis evolucionista.
En mis notas para la presentación tenia versículos del Antiguo y Nuevo Testamento. Comencé hablando de un Dios que creó todo por amor. Señalé las desgracias que la humanidad sufre por el pecado. Presenté la ley de Dios y su lugar en la cosmovisión judeocristiana. Resalté el hecho de que los judíos esperaban a un Mesías que los salvaría y cómo el cristianismo presenta a Jesucristo como el cumplimiento de esa promesa. Concluí diciendo que aquellos que creen en Jesús, no serán destruidos sino que tendrán vida eterna.
Cuando terminé, se sentía un ambiente solemne y de reflexión, mis compañeros y el profesor sintieron el llamado de Dios a adorarlo y reconocerlo como Creador. Con una expresión confusa el maestro me dijo que yo había predicado, en vez de haber realizado una exposición. A esto le respondí de manera firme que solo había expuesto lo que estas religiones creen, a lo que él me contestó que mi ponencia fue excelente. Ese día muchos conocieron a Jesús en la clase de Evolucionismo.
Hoy te invito a que testifiques siempre de Jesús, a que no te avergüences del evangelio y comprobarás que es poder de Dios para salvación.