“Violencia”
“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre […] Príncipe de Paz’ (Isaías 9:6).
La “masacre de Columbine”, escuela secundaria de Littleton, Colorado, es conocida como la mayor matanza realizada en un establecimiento educativo de nivel secundario de los Estados Unidos, y la quinta peor masacre en un centro educativo de ese mismo país. Murieron 15 personas, y 24 resultaron heridas. Los autores de este horrible crimen fueron Eric Harris y Dylan Klebold, alumnos de esa escuela, quienes se suicidaron luego del tiroteo.
El vínculo entre el bullying y la violencia escolar ha sido bien establecido. Después de la masacre, el Servicio Secreto de los Estados Unidos realizó un estudio de 37 tiroteos premeditados en escuelas y encontró que el bullying que algunos de quienes perpetraron estas masacres describieron como “atormentador”, desempeñó un papel preponderante en dos tercios de los ataques. Algunos investigadores señalan que Harris y Klebold eran víctimas del acoso de sus pares en Columbine.
Otros señalaron que eran fanáticos de videojuegos como Doom, Wolfenstein 3D y Duke Nukem, que se destacan por su gran carga de violencia extrema.
Otros señalaron la música rock gótica, que destaca lo siniestro, como uno de los factores que influyeron en la conducta de estos jóvenes. Particularmente, los medios señalaron el gusto de ellos por la banda de Marilyn Manson: sus videos musicales están ambientados en un contexto de violencia y sangre.
El documental “Bowling for Columbine” (conocido como “Un país en armas”, en Argentina, o como “Masacre en Columbine”, en México), escrito, dirigido y narrado por Michael Moore, explora las principales causas de la masacre de Columbine y otros hechos semejantes con armas de fuego. Ganó varios premios Oscar a la mejor película documental. Moore afirma que uno de los principales factores de estas matanzas es la cultura armamentística estadounidense, que fomenta el fácil acceso a armas por parte de la ciudadanía común.
Aunque a ninguna de estas influencias aisladas puede atribuírsele la causa -estos episodios son complejos y tienen una multiplicidad de causas-, todos tienen un común denominador: la violencia. Hoy, vivimos bombardeados por los medios con actos violentos. Para el momento en que un joven cumple 18 años, habrá sido testigo de más de 200 mil actos de violencia y 16 mil asesinatos, en los medios.
Hoy, decide pasar menos tiempo ante los medios de comunicación, cargados de violencia maligna. En su lugar, dedica una hora cada día a contemplar la vida y el ministerio de Jesús, el Príncipe de paz. MB
DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2017
UN DÍA HISTÓRICO
Pablo Ale – Marcos Blanco
Lecturas devocionales para Jóvenes 2017